Los gigantes tecnológicos chinos están sustituyendo el efectivo por transacciones de pago con el móvil. En 2017, las plataformas de terceros en China manejaron $ 15,4 billones en pagos móviles, más de 40 veces el monto procesado en los EE. UU.
Alipay, propiedad de Alibaba, manejó casi el 54 por ciento de esos pagos. Por su parte WeChat Pay, propiedad de Tencent, procesó alrededor del 39 por ciento.
Esta guerra por mantener la cuota de mercado le ha costado a Ant Financial demasiado. Los descuentos y rebajas que proporcionó a sus clientes para retenerlos en su esquema de pagos Alipay contribuyeron a una pérdida trimestral poco común. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, WeChat Pay continúa ganando terreno. De hecho, ha acortado la brecha de mercado con Alipay en los últimos tiempos.
Cuestión de datos
Si bien las tarifas de transacción son buenas, el dominio del mercado de los pagos móviles implica además que las empresas pueden acumular datos acerca del comportamiento de los usuarios. Esta información es absolutamente necesaria a la hora de lanzar otros productos como préstamos o fondos de inversión.
Estados Unidos se está quedando atrás
Estados Unidos está demorando la adopción de pagos móviles mas de lo que debería. A pesar de que muchos teléfonos inteligentes en circulación tienen la capacidad de ser utilizados en pagos, los sistemas de Google y Apple han avanzado de manera lenta. No obstante, Starbucks, un outsider de este negocio se destaca como una excepción y representa alrededor del 40 por ciento de todos los pagos móviles realizados en Estados Unidos.